Kratovo
Kratovo se encuentra en la parte noreste de la República de Macedonia. La pequeña ciudad está situada en la parte suroeste a los pies de los Montes de Osogovo, en el Valle del Río Kratovska, un afluente izquierdo de Kriva Reka. Se supone que en el lugar de la ciudad de hoy había un pueblo llamado Kratiskara. Bajo el nombre Kratis o Koriton el asentamiento está mencionado ya en el período bizantino y el nombre actual lo recibe debido a su ubicación en el cráter de un volcán extinto. En la Edad Media la actividad económica más importante fue la minería, desarrollada por la tribu de los Sasos. Como un área de comercio-minera importante en la segunda mitad del siglo XIII, Kratovo en el siglo XIV se hizo conocido como centro comercial visitado por muchos comerciantes de Dubrovnik. Durante el Imperio Otomano avanzaron la minería y el comercio. En el siglo XVI fue el mayor centro minero en la parte europea de Turquía. En ese y en el siguiente siglo XVII se acuñaban monedas de plata y se fabricaban productos de cobre. Después de la guerra austro-turca y sublevación de Karposh, Kratovo entra en declive económico. En la primera mitad del siglo XIX contaba de 5.000 a 6000 habitantes, y a los finales del siglo XIX la población se redujo a cerca de 4.000 habitantes. Entre las dos guerras mundiales, Kratovo no marca crecimiento económico ni demográfico. Después de la Segunda Guerra Mundial, la población creció de forma continua, pero a un ritmo moderado, así que de unos 2.000 habitantes en 1948 creció a cerca de 7.000 habitantes en el año 2002. A y de Kratovo conduce solamente una carretera. Así, comunica al noroeste con Kumanovo y Kriva Palanka y al sur con Probishtip. Hoy Kratovo es un centro administrativo, educativo y de salud en su área gravitacional. Papel de liderazgo en la economía tienen la minería y la industria.
La arquitectura de Kratovo
Las condiciones de alivio de espacio propiciaron que en Kratovo se desarrllase un especial enfoque arquitectónico y constructivo. Las casas se colocan en hileras como un anfiteatro, sus partes inferiores tienen significativamente mayoras alturas con relación a las partes superiores. Principalmente tienen dos o varios pisos, con balcones colgantes, desde donde se puede ver el panorama de la ciudad. La arquitectura de Kratovo la caracterizan las estrechas y empinadas calles, varios puentes, así como muchas tiendas de artesanía tradicional y varios edificios antiguos y más recientes construcciones arquitectónicas.
Ubicados a lo largo del Bazar, junto con las torres, los puentes dan a la ciudad un carácter medieval y el ambiente de un museo-ciudad. Por Kratovo pasan los ríos: Matenitsa, Baba Karina y Tabochka que se unen en el centro de Kratovo y forman el Río de Kratovo. Los puentes se construyeron de piedra labrada, en forma de arcos que descienden a ambos bancos. Son construidos sobre ríos muy inclinados y profundos, por eso son visibles uno con otro. El más famoso es el puente de Rada, pero también cautivan por su belleza los puentes: Grofchanski, Charshiski, Yokshirski, Agrulichki y Gornomaalski.
Para el más famoso puente de Rada dice la leyenda conmovedora que en las fundaciones del puente Rada fue amurallada viva. Según la historia, el puente lo estaban construyendo nueve hermanos, pero el puente cayó varias veces así que decidieron reforzarlo amurallando viva a la cuñada más joven. Ella tenía un bebe varón y llorando pedía que le dejaran la mama derecha libre para poder amamantar a su hijo. El puente se encuentra en el río Mantseva, erigido en dos torres altas.
Kratovo es la ciudad con el mayor número de torres medievales en Macedonia, 17 en total. Doce están situadas en el lado izquierdo de Kratovo, y cinco a la derecha. Sólo seis de ellaqs se han conservado, mientras que otras están muy dañados. La mayor parte de las torres sufrieron durante la sublevación de Karposh. La torre de Zlatko es la más antigua y la más rica, construida en 1365. Nombrada después de su último propietario, Gjorgji Zlatkov, que la compró de Asan Efendi, bajo cuyo nombre entonces se llamaba. Fue construida de gruesos muros de piedra, y tiene una altura de unos seis metros. Hay tres plantas y se puede entrar a través de escaleras móviles. En la parte sureste hay un agujero, allí está el cuarto de baño. La torre de Emin Bey tiene una altura de trece metros y anchura de seis metros. La puerta está construida de piedra. A la derecha de la entrada, en forma de un cuerno, se construyó una pirámide como un objeto independiente. Eso era el cuarto de baño. La torre cuenta con tres pisos, divididos por una estructura de madera.
El espesor de la puerta es mayor que en las otras torres y se abren al girar los ejes gruesos inclinados en una ranura de piedra. En el tercer piso hay una chimenea, un nicho, estantes y armarios para guardar. La Torre Smikjeva en Kratovo es la más importante, es la más alta y la más bella a la vez.
Construida en 1370 por el entonces gobernador de Kratovo, el dignatario Kostadin Deyanov. En la parte interior se divide en plantas, de las cuales la más hermosa es la cuarta, con una maravillosa vista de la ciudad. A la parte superior se puede llegar a través de escaleras de piedra que parecen un túnel lacadas en la pared del sur, por lo que uno tiene la impresión de que se mueve a través de un túnel. La torre cuenta con un total de 69 escalones, iluminados por tres pequeñas aberturas, una de las cuales situada en la pared norte, sirve para mirar hacia fuera y está protegida por una cubierta de piedra. En la torre en 1921 se colocó un reloj, así que hoy la torre es conocida como la torre-reloj de la ciudad.
Tsotsev Kamen
Tsotsev Kamen es una roca de origen volcánico, tiene unos cien metros de altura y millones de años de edad, hoy es considerada como un observatorio prehistórico.
Se trata de un asentamiento neolítico, situado a 25 kilómetros al oeste de Kratovo, cerca de la aldea Shopsko Rudari. La roca en sí es un templo espiritual, evidente por los numerosos restos visibles hoy en día, pero también como causa de los objetos encontrados en las cercanías. Desde la distancia, Tsostev Kamen se parece a cualquier otra roca. Pero a pocos pasos se abre una localidad grandiosa. Las ranuras en forma de cuevas están colocadas en varios pisos y en frente de ellos hay plataformas, cuencas para el baño ritual, restos de una escalera, trono de piedra y asientos. Hace unos 10.000 años aquí se realizaban danzas rituales, se bañaban bajo la cascada y ofrecían sacrificios a los dioses del vino y de la fertilidad. Hasta las cuevas se puede llegar únicamente con ayuda de escaleras, y la escalada por las rocas empinadas es un deporte extremo. Su función de observatorio de la Edad de Piedra, se mantuvo en el Neolítico y en la Edad del Bronce. Unos siglos después de Cristo, el santuario se extinguió. El valor de Tsotsev Kamen fue descubierto en el año 1971. Algunos investigadores creen que esta localidad es el único sitio en el mundo, donde en un solo lugar hay un santuario, un altar de sacrificios y un observatorio.